Para hacer broches de fieltro necesitamos:
- Fieltro de diferentes colores y grosores
- Plantillas de flores, corazones, etc.
- Hilo de diversos colores
- Botones
- Retales de ropa
- O cualquier otro elemento que nos apetezca incluir en el broche
Primero escogemos la plantilla que más nos guste para hacer nuestro broche. En esta ocasión, yo he elegido la plantilla de una flor. Es interesante tener las plantillas recortadas y plastificadas, así las tendremos siempre a nuestra disposición. Podemos encontrar por internet diversas plantillas y de muchos tamaños diferentes, o simplemente podemos hacer la nuestra propia.
Una vez elegida, dibujamos sobre el fieltro con lápiz o con un roller suave y a continuación la recortamos. Para la base del broche, en este caso, yo he escogido un fieltro más grueso. De ésta manera le da rigidez al broche. Detrás del fieltro base, cosemos el broche (yo normalmente lo hago antes de coser el resto de fieltro).
Una vez tenemos recortadas todas las partes de nuestro broche, le añadimos los detalles que queramos incluir. Por ejemplo, en éste broche yo he cosido unos botones de diferentes colores. Podemos incluir cualquier cosa que nos guste o que se nos ocurra y que tengamos por casa (botones, trozos de tela...).
Para poner los botones, la tela o lo que queramos incluir, yo recomiendo coser todo lo que se pueda y dejar el pegamento para la última opción, ya que la fijación que nos da la costura suele ser mejor que el pegamento. No obstante, si optáis por el pegamento, mirad siempre que sea adecuado para fieltro y telas.
Una vez tenemos los detalles cosidos o pegados, debemos coser las partes que forman nuestro broche para que de ésta manera quede todo junto.
El resultado puede ser éste:
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